Se nos ha recordado la importancia de mantener nuestros huesos fuertes desde la infancia. Pero también hemos aprendido que incorporar suficiente calcio en nuestra dieta va más allá que simplemente beber un vaso de leche por la mañana.
Según Caroline Cederquist, médica certificada y fundadora y directora médica de BistroMD, la edad es un factor clave que influye en las necesidades de calcio de una persona. Menciona estudios que consideran la osteoporosis como la "enfermedad silenciosa del siglo XXI".
El consumo necesario de calcio cambia a medida que envejecemos. Te compartimos algunas recomendaciones de expertos.
La doctora destaca que los cambios más significativos en las necesidades de calcio suceden durante la niñez y nuevamente durante la edad adulta. “El calcio necesita cambios a lo largo de la vida debido a los cambios naturales que experimenta nuestro cuerpo."
A medida que las personas llegan a la edad adulta, las necesidades de calcio comienzan a aumentar para preservar la fuerza ósea y reducir el riesgo de osteoporosis y lesiones. Esto se logra de manera más efectiva al combinar el consumo de calcio con Vitamina D.
Si bien no todo el mundo experimenta síntomas de deficiencia de calcio, algunos pueden experimentar espasmos musculares, entumecimiento y hormigueo en las extremidades, y fatiga.
El consumir alimentos ricos en calcio, ayuda a alcanzar los niveles necesarios. Si bien encontramos este mineral en productos lácteos, también se encuentra en alimentos de origen vegetal como el kale, ajonjolí, frijoles rojos y brócoli. Sin embargo, tener en cuenta las cantidades exactas de los alimentos para alcanzar el nivel ideal no es sencillo para la mayoría. Por eso, recurrir a alternativas como suplementos alimenticios es una excelente opción.
Referencia
Cederquist, Caroline. Cederquist Medical Wellness Center. Bistro MD.